Acerca de mí

Mi nombre es Kareen con doble "e"

Hace un tiempo cree una marca, Mageiarts. Interesada por mejorar las fotos para las redes sociales, me inscribí en un curso de fotografía. Una cosa llevó a la otra y aquí estoy, enganchada de esta profesión. Mi historia antes de eso va de muchas cosas, sobre todo yoga y varios años de teclear códigos de contenedores…

Hola, soy Kareen Hernández, fotógrafa profesional, creadora de este espacio.

Lampyris

viene de los lampíridos, curucusíes, bichitos de luz, cocuyos o luciérnagas, insectos que son capaces de emitir su propia luz. Más allá de eso, los lampíridos logran comunicarse entre ellos en un código único de luces y sombras. Entonces, si la fotografía etimológicamente es dibujar con la luz, para mí, Lampyris Graph es poder captar esa expresión, balance o reflejo exclusivo de cada persona, momento o idea, o lo que sería hacer su fotografía lampírida.

La fotografía es un arte, profesión y oficio con posibilidades expansivas. Después de 5 años de estudios, mucha práctica y aprendizaje, soy consciente de mi relación con los paisajes para entenderme, con la calle para contemplarme en mi entorno y la botánica para sumergirme en mi cotidianidad. Si te interesa todo ese trabajo personal lo puedes ver en kareenhernandez.com donde podrás encontrar mi primer Foto Libro, “Que nunca callen las campanas”.

En mis trabajos ha sido muy enriquecedor conocer los procesos creativos e historias detrás de una marca, persona o proyecto, por eso insisto en el poder de la conversación y la curiosidad como herramienta para lograr plasmar las ideas.

Desde que empecé a fotografiar celebraciones y momentos especiales de familia y amigos, trato de pasar desapercibida, para que las poses queden de segunda opción y así poder registrar los momentos auténticos, que tendrán más valor con el pasar del tiempo y formarán parte de historias y recuerdos personales.

Mis recuerdos

Mis primeras memorias con la fotografía vienen con Alirio, el fotógrafo de mi familia. Por años, para hacerme reír, él hacía un juego donde se arrancaba un pulgar. Aprecio hoy su trabajo y el interés de mi mamá y mis tías por guardar momentos que hoy son muy valiosos para mí. Aquí comparto algunos, mis propias historias y fotografias lampíridas.